Hoy me ha contado Ruedas una cosa de esas que te quedas bizco cuando te enteras porque no te las esperas. Y es que resulta que el Ayuntamiento de Santander ha decidido que su web se accesible para todo el mundo, incluyendo a las personas con diversidad funcional.
Para los ciegos, la web habla; para los que no pueden manejar ni el ratón ni el teclado, se puede entrar en la página ¡soplando!
Yo, desde luego, me he quedado con las patas p´arriba. No dejéis de leerlo en el Blog de Ruedas. Es alucinante.
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